Como cualquier persona mínimamente en contacto con el mundillo, desde siempre he sido consciente de la existencia del Blood Bowl, pero nunca me había llamado especialmente la atención. De hecho, lo consideraba una versión del Warhammer Fantasy Battle encapsulado en un terreno de juego de 26x15, limitado a 11 guerreros por bando y con un objeto ovalado de cuero de por medio.
Hace unas semanas, buscando un juego de PC ligero (ligero no significa
basura gratuita) que me permitiese matar horas muertas como pueden ser las del domingo tarde, cuando la cercanía del lunes hace que se te quiten hasta las ganas de ver porno, caí en la cuenta de que hacía poco que había salido una nueva versión de este juego.
Según parece no es el primer intento de crear un juego sobre el Blood Bowl para PC. La misma Cyanide, empresa desarrolladora del juego, había creado otro hace tiempo sin demasiada fortuna. Tanto es así que Games Workshop les prohibió usar su nombre y el juego pasó a llamarse Chaos League.
Pero los chicos de Cyanide no se dejaron desmoralizar y, tiempo después, volvieron a la carga con un nuevo intento. Esta vez sí, consiguieron un producto digno del juego de mesa, y digno de que los ladrones vendedores de humo de Games Workshop les permitiesen estampar su logo en la portada del videojuego.
El juego se llamó, como no podía ser de otra manera, Blood Bowl. E, inicialmente, incluía 9 de las razas disponibles en el juego de mesa.
Posteriormente, Cyanide demostraría que había aprendido esa valiosa lección que cada día nos enseña Games Workshop consistente en vender humo, a ser posible por fascículos, y a ser posible haciendo que cada nuevo fascículo convierta en obsoleto el anterior. Como digo, Cyanide aprendió la lección y, poco después, sacaría a la venta un nuevo juego llamado Blood Bowl: Legendary Edition. Exactamente el mismo juego, pero incluyendo 21 razas diferentes. Y, como no, haciendo obsoleto el juego anterior, no fuese a ser que algún friki listillo decidiese no gastar sus monedas de oro en el nuevo juego.
Pero para demostración de robo impune, la que perpetraron hacia los usuarios de Xbox360. En esta consola únicamente ha salido la edición básica del juego con 9 razas. No obstante, haciendo alarde de generosidad sin par, Cyanide editó una ampliación sólo disponible por internet en el bazar Xbox en la que incluía una décima raza, Elfos Oscuros. Previo pago de un módico precio, por supuesto.
Aunque, en descargo de Cyanide, debo decir que algunas fuentes aseguran que ellos deseaban hacer la ampliación gratuita, pero que fueron los señores de Microsoft los que les obligaron a ponerle precio. Microsoft y Games Workshop, combinación letal para los bolsillos de los frikis.
No obstante, no creamos que ya han terminado de abusar de nuestros maltrechos bolsillos. Entre los fikis más irredentos parece que se levantó cierta polémica ante la ausencia en el juego de una de las razas más carismáticas; los Enanos del Caos. Vete tú a saber porqué será una raza carismática. En cualquier caso, por parte de Cyanide se ha puesto la excusa de que esa raza tiene tantas peculiaridades, tanto a nivel de reglas como de diseño de jugadores, que no les dió tiempo a incluirla para la fecha de lanzamiento. Así que no descartemos un futuro Blood Bowl LE2 sólo para incluir a los putos enanos. A un módico precio. Y haciendo obsoleto el anterior, claro.
Personalmente, y habiendo sufrido a los enanos en mis propias carnes, no tengo ninguna prisa por ver a sus primos del Caos corriendo por los terrenos de juego.
¿Que qué equipo uso yo? Como cualquiera que me conozca mínimamente sabría, sólo puedo elegir un equipo (No, Enanos no. Lo de los Enanos fue sólo una fase en mi vida).
The Amazons! Te vamos a romper los huevosEl juego representa fielmente a su contrapartida de tablero. Tanto es así, que yo suelo jugar con el manual impreso a modo de guía de consulta.
Con 11 jugadores por bando el objetivo es sencillo, llevar el balón hasta la linea de touchdown del contrario. Cuantas más veces, mejor. A ser posible más veces de las que lo haga el rival en tu propia línea de TD.
Un partido consta de dos partes de 8 turnos cada una, para un total de 16 turnos por jugador. Al comenzar a jugar a BB hay dos puntos que me llamaron especialmente la atención con respecto a otros juegos de estrategia.
Por un lado, el fin del turno. Un turno no solo termina cuando has usado a todos tus jugadores o cuando tú decides que has terminado, también termina cuando fallas una acción. Cualquier acción. Si haces un pase y éste falla, termina tu turno. Si intentas esquivar a un contrario y fallas, termina tu turno. Eso te obliga a pensar y organizar mucho qué acciones realizar primero y cuales después, dado que hacer una acción difícil al principio de tu turno puede hacer que éste termine en el acto. Yo he llegado a estar hasta 4 turnos consecutivos sin jugar al fallar una y otra vez la primera acción que intentaba.
El otro aspecto curioso tiene relación con una vieja discusión que tenemos entre Juls y yo. Creo que surgió cuando jugué al
Pretty Soldier Wars AD 2048. En este juego, cada uno de los personajes podía realizar dos acciones; moverse y disparar. Pero debía realizarlas en este orden preciso, primero mover y luego disparar. Esto siempre me pareció una mierda y prefiero juegos donde te dejen organizarte como te venga en gana, como el UFO o el Space Hulk. Juls piensa que... bueno, Juls no tiene ni puta idea de casi nada, así que poco importa lo que piense.
En cualquier caso, en Blood Bowl la cosa difiere un poco y cada jugador sólo puede realizar una acción; o mueve o ataca. Eso hace que un jugador sólo pueda atacar cuando comienza el turno junto a un contrario. Lógicamente, claro, pues si no fuese así debería moverse hasta colocarse junto al contrario y, habiendo movido, no podría hacer ninguna otra cosa.
Este límite en cuanto a acciones tiene una excepción: Una vez por turno, un único jugador del equipo puede hacer una embestida (el juego le llama hacer una penetración pero esa palabra, fuera del ámbito del porno, no me acaba de gustar). El caso es que una embestida consiste en que un jugador puede moverse hasta un contrario y placarlo. Es el único supuesto en que un jugador puede mover y atacar en el mismo turno.
Todo esto hace del Blood Bowl un juego más complejo de lo que puede parecer a simple vista, ya que te obliga a planear muy bien cada uno de los turnos. Tanto en la parte de organizar los movimientos que realizaremos durante el turno, por el hecho de que un fallo conduce al fin de turno inmediato, como por el hecho de que debemos tener muy claro cómo y donde queremos que acaben el turno nuestros jugadores. Recordemos que dejar a un jugador junto a un contrario significa que el contrario podrá golpearle, pero por otro lado, si le golpea, no podrá mover...
Cada una de las 21 razas que aparecen en juego de PC (en el de mesa hay varias más) tiene sus peculiaridades y estilos de juego diferenciados. Aunque bien es cierto que hay varias razas consideradas comúnmente como "de cachondeo". Equipos que nadie que pretenda hacer partidos serios utiliza. Éstos serían los equipos de Halflings, Saurios, Vampiros, Snotlings o Goblins. Aunque sobre la competitividad de los equipos de goblins no hay consenso claro.
Como primera aproximación a Blood Bowl para alguien novicio, se suele considerar que los mejores equipos son los de Humanos u Orcos y, en menor medida, No muertos. Es por ello que en la caja del juego de mesa, Humanos y Orcos son los dos equipos que vienen de serie.
Esto es así por dos motivos: Primero porque esos equipos son los más equilibrados y donde las posiciones dentro del campo están más delimitadas. Simplificando el juego, sólo hay tres tipos de jugadores: Defensas, Lanzadores y Receptores. Los defensas defienden, los lanzadores mueven el balón y tiran pases y los receptores reciben los pases y se lanzan hacia la línea de anotación. Este estilo sencillo de juego es el que cualquiera que comience a jugar debería aprender. Y esas razas que comentaba antes son las que mejor se adaptan a él.
El resto de razas son más complejas de jugar y exigen otro tipo de tácticas. Elfos Oscuros, por ejemplo, basan su juego en intentar abrir la defensa contraria usando su agilidad, entregar el balón en la mano en lugar de hacer pases y aprovechar su velocidad para evitar ser placados. Los odiosos enanos basan su juego en formar una muralla impenetrable y avanzar lentos pero seguros, sin hacer ningún gesto de más para evitar tiradas de agilidad.
En definitiva, son estilos de juego peculiares que sólo deberían intentarse cuando se controles los conceptos básicos del BB.
El segundo motivo es el de evitar coger malos hábitos. Orcos y Humanos son equipos equilibrados, sin ventajas claras en ningún aspecto, pero tampoco con ningún defecto claro. Si un novato comenzase a jugar con elfos, por ejemplo, podría llegar a pensar que pasar tiradas de agilidad, esquivar rivales o hacer pases largos y complicados es algo normal en el BB. Si comenzase con equipos de Caos o Enanos, ese mismo novato podría pensar que aniquilar rivales, acabar los partidos con la enfermería vacía o no asistir nunca a un funeral es cosa fácil. Y, creedme, no lo es.
Pero volvamos al videojuego. Éste tiene básicamente dos modos de juegos; el modo Campaña, donde nos crearemos un equipo nuevo con el que iremos de ciudad en ciudad participando en campeonatos. Conforme ganemos partidos y campeonatos, nuestro prestigio aumentará, lo que nos permitirá participar en campeonatos de mayor enjundia.
El otro modo de juego es el modo Historia. En este modo encarnamos a un entrenador trotamundos, que será fichado por diversos equipos. En nuestro periplo participaremos en los encuentros y campeonatos más famosos de la historia del Blood Bowl.
A parte de estos modos, también tenemos las opciones clásicas de cualquier juego deportivo; partido amistoso, torneo personalizado, etc
El juego tiene tres niveles de dificultad, aunque la IA deja bastante que desear y haber jugado una docena de partidos es más que suficiente para ganar el 90% de los partidos que juegues contra el ordenador. De hecho, aumentar el nivel de dificultad únicamente hace que los equipos contrarios tengan más nivel, no mejorar la capacidad de juego de la máquina.
Cuando juegas por internet la cosa cambia y el juego adquiere otra dimensión totalmente diferente. Ahí te das cuenta del lamentablemente bajo nivel de juego que ofrece la máquina. Por desgracia lo peor del juego por internet son, paradójicamente, los jugadores. La mayoría de la gente parece no haberse dado cuenta que está jugando a Blood Bowl y no a Warhammer Fantasy Battle o al HeroScape.
¿El balón? Quizá luegoAsí, nos encontramos con mucha gente que renuncia por completo a jugar para reducir las partidas a una escaramuza o a un intercambio de golpes olvidandose totalmente del balón. Y es una lástima, pues el juego es mucho más complejo de lo que pueda parecer a simple vista y puede ofrecer partidos realmente interesantes si los dos jugadores se deciden a jugar.
En definitiva y para terminar considero el Blood Bowl como una grata sorpresa después de tantos años ignorándolo voluntariamente. Y el juego de PC uno de esos juegos que bien merece pagar el precio que vale.