Regresan los realitys ¡¡¡¡¡nooooooo!!!!!!

Sí amigos, ha llegado septiembre, y al igual que los kioscos se llenan de coleccionables maravillosos, las televisiones también nos vomitan una serie de programas ridículos e insustanciales que llenan las horas de la parrilla televisiva.

Idear un programa de estos es realmente sencillo, lo único que necesitas es coger a un grupo de personas y crear artificalmente algo de tensión, principalmente interesan de dos clases: sexual y de confrontación.

Según mis gustos, si quiero ver tensión sexual le propongo a mi novia una postura nueva y exótica (eso sí que es un momento de tensión) y si quiero disfrutar de algo de confrontación me veo una peli de Jackie Chan o de Van Damme (de las antiguas, claro). Es lo que tiene ser friki, tenemos las ideas claras.

Llegados a este punto lo importante es controlar el cásting. Todo se reduce a buscar a la panda de degenerados más desvergonzada y sin escrúpulos que puedas encontrar y meterlos todos en una situación comprometida. Los encierras en una casa, los metes en una isla, los haces viajar por ahí... en definitiva, a joderles bien.

Recuerdo que al principio Gran Hermano lo vendían como un experimento social o algo por el estilo, como mínimo ahora tienen la decencia de admitir que el principal motivo de la nueva edición es por la audiencia tan brutal que tienen. Porque ese programa de experimento social tiene bastante poco, tal vez experimento "científico-bacteriano" sería más adecuado.

Pero no entiendo por qué quedarse en medias tintas, apoyando el intento radical de Gran Hermano en su última edición de meter a un transexual con un musulmán, propondría otras situaciones igual de divertidas:

- Un negro y uno del KuKluxKlan.
- Un bakalaero y un fan de Rocío Jurado.
- Un nazi y un judío ortodoxo.
- A Carod Rovira y Jiménez Los Santos (¿podría surgir alguna escena caliente en el jacuzzi entre estos hombretones...?)

En una habitación se podría recrear una Cúpula del Trueno, para ya sabéis, eso de dos entran y sólo uno sale, sería genial, con machetes, bidones de gasolina, taladradoras, sopletes... jo, eso sí sería un puto reality interesante.

Un nuevo programa amenaza con paralizarnos el cerebro: Pekín Expréss. Una copia de un programa yanki con mucho más presupuesto donde los concursantes viajan por todo el mundo. El de aquí no, claro, este sólo pasará por Rusia, Mongolia y China que son mucho más baratos.

Los concursantes no tienen desperdicio:

- Las señoras-gogó, bastante desgastadas por cierto (supongo que por el uso) y eso desde el respeto que me merece la profesión de gogó, puf, con el tiempo que yo he dedicado a admirar su arte en discotecas... pero estas las habeis cogido un poco pasaditas ¿no?

- Dos drag-queen, que un reality sin homosexuales no es un auténtico reality.

- El estudiante de ciencias políticas que participa con la chacha que le limpia su pisito de estudiante... ¿cuánta asignación le dará papa a la semana?

- "Una pareja en permanente crisis..." ¿se puede tener menos sentido común que una pareja con problemas decida unirse a un programa de televisión? o poco valor le dan a la pareja o es un montaje genialmente estudiado.

- Y la guinda la pone el duo formado por dos desconocidos entre sí: una alegre divorciada sediente de emociones (y sexo) y un coleguilla de barrio que practica kickboxing ¡voilá!

Personalmente ver al "niño de papa" pedirle a un hombre humilde, que seguramente sufre para llegar a fin de mes, que los lleve en coche hasta un lugar para ganar un miserable concurso me revuelve las tripas.

Por suerte no todo lo que dan en la tele es una mierda, de tanto en cuanto podemos disfrutar de algun estreno digno de subir a los altares frikis, por supuesto estoy hablando de: PLUTON BRBNERO.

Y si además nos brinda una nueva musa a adorar por las hordas frikis, ya ni te cuento...


CAROLINA BANG