Ahora que liga y champions tocan a su fin y el mundial está a la vuelta de la esquina he decidido dedicar unas lineas al deporte rey por excelencia: el fútbol, bueno, nos entendemos: ver el fútbol por el sofá. Aprovecho la ocasión para rescatar e ilustrar el post con algunas fotos de jugadores míticos que siempre se ven ensombrecidos por los clásicos: Di Stéfano, Pelé, Maradona y Cruyff.
Mi jugador favorito: Michael Laudrup
El otro día estaba meditando en las razones por la cuales hay deportes que cambian las reglas contínuamente (léase Fórmula 1) y luego otros como el fútbol en los que apenas hay cambios. Si no recuerdo mal, algunos de los últimos cambios fueron:
1) El gol de oro. Descartado del todo, porque ningún equipo quiere marcharse a casa antes de hora y por tanto toca catenaccio para ver si al menos llegamos vivos a los penalties.
2) La cesión al portero por un jugador del mismo equipo. En este caso sí que sigue vigente.
3) Otro árbitro más detrás de la portería. Esta no cuenta...
Entre los mejores delanteros de todos los tiempos: Giuseppe Signori
De ahí que se me haya ocurrido alguna que otra mejora que podría adoptar el fútbol, siempre con una máxima en mente: el espectáculo por encima de todo. Al final sólo se me han ocurrido un par de ideas para la causa, vayamos primero con la explicación formal (más o menos de manual) y luego la que entendemos todos, coged aire:
Cualquier balón que tras haber sido golpeado de forma reglamentaria describa una trayectoria aérea que transpase los límites del terreno de juego podrá seguir jugándose siempre y cuando el balón no haya tocado el suelo del exterior del campo.
Ejemplo número 1. El saque de esquina podría aprovechar la curva por fuera del campo de fútbol si el futbolista es lo bastante diestro para realizar dicha acción.
Ejemplo número 2. Cualquier pase lateral.
Obviamente fueras de juego, cesiones al portero y demás reglas siguen aplicándose como siempre.
Zinedine Zidane: sobran las palabras
La segunda regla que proponemos viene un poco al hilo de la primera y ambas tienen sinergia:
Cualquier jugador podrá devolver al terreno de juego una pelota que estando en el aire haya transpasado el límite del campo pero sin haber tocado el suelo siempre y cuando dicho jugador no apoye ninguna parte de su cuerpo en el exterior del campo durante la recuperación del balón.
Es decir, se podrán realizar saltos y patadas karatekas (a lo Ibrahimovic) para evitar que el balón salga del terreno de juego mientras no se apoyen de la parte exterior del campo.
Otro grande de Italia: Gianfranco Zola
Todavía no sé si excluir a los porteros en esta regla, ya que siempre es más emocionante ver un córner que un saque del portero.
Estas reglas tienen las siguientes ventajas:
1) La pelota está más tiempo en juego, por lo que hay menos interrupciones. 2) El juego es más espectacular.
A partir de aquí ya dejamos en manos de los señores de la FIFA la oportuna aplicación.
Incombustible estandarte del Manchester United: Ryan Giggs
Aprovechamos para desearle suerte a la selección española en el mundial y a ver si se vuelven con la copa que ya es hora. Felicitamos también al Atlético de Madrid por su reciente Europa League.
El mejor jugador portugués: Rui Costa (no admite discusión)
Para que los frikis de las consolas no pierdan el tiempo innecesariamente empezaré diciendo que el Pro Evolution Soccer y el Fifa xxxx son dos grandes ñordos de juegos (ale, ya podéis largaros profundamente ofendidos). Aquí se va a hablar de los MEJORES juegos de fútbol realizados jamás, y esos, mis jóvenes y sobrealimentados padawan, no son otros que el Tehkan World Cup, el Tecmo World Cup 90 (o Euro League), el Super Sidekicks y el Pc fútbol.
Nuestro querido enemigo Joss también habló del Capitán Tsubasa en su día, pero no profundizó lo que se merecía este polémico tema.
En todos y cada uno de los juegos a los que he jugado han mostrado la misma debilidad en su funcionamiento, una auténtica pesadilla para el jugón: el momento en el que se maneja al portero.
Los contrarios se acercan a tu portería con peligro, tú te vuelves loco para conseguir detener (de manera sucia si es necesario) al que lleva la pelota ¡y de repente te cambian el control al portero! ¡PERO QUE MIERDA...! como ibas corriendo con el defensa el movimiento sigue con el portero y te vas hacia donde no es ¡COJONES QUE LA PORTERÍA ESTA SOLA! entonces movías el joystick como un loco para rectificar pero estas descolocado y nervioso ¡RAPIDO, JODER...! y pasaba lo que tenía que pasar.
A ningún programador se le ocurrió arreglar esa paradoja, hay que joderse. De cada cinco ocasiones que llegaban a mi portería, cuatro eran gol, la quinta la fallaban ellos solos o el portero se tiraba por voluntad propia, incomprensiblemente, hacia el lado correcto. Mi punto fuerte era el ataque. Podían meterme tres goles, que yo les colaba cuatro, ¡ja!
Tecmo World Cup 90 - Euro League
Cuando las churrerías eran todavía un buen negocio y no habían cerrado la mayoría, la que había al lado de mi casa tenía la primera maquinita a la que recuerdo haber jugado en mi vida: el Vigilante era ese primer juego... pero no nos vayamos por las ramas, a diferencia de Aquelllos maravillosos años, aquí no hay flashbacks dentro de flashbacks, demasiado complicado para mi respetable público.
Yo creo que primero jugué al Euro League y más tarde ví el del mundial del 90, con muchos más acabados. Los dos títulos son prácticamente iguales, sólo que, como es obvio, cambia la equipación y el nombre de los equipos. En el EuroLeague podemos elegir equipos como el Barcelona, el PSV o el Milan mientras que en el World Cup teníamos a Argentina, Inglaterra, Alemania, etc...
Jugabilidad perfecta: con dos botones tenías todo lo que querías. Botón 1: con balón chute raso, sin balón segada. Botón 2: con balón pase bombeado, sin balón salto para cabecear. ¿Y quien necesita más?
En aquella época los juegos tenían el buen criterio de permitir algunos trucos para meter un gol, de esa forma los cinco duros te duraban más (algo básico para los recreativo-adictos) y este gran juego tenía unos cuantos. Los que recuerdo, que pueden no ser todos, son los siguientes:
1) El chute raso desde la esquina inferior del semicírculo del area grande. Gol seguro.
2) Chute alto, rechace del portero, cabezazo y gol. Este no era infalible, pero si te rechazaba tu cabezazo, podías intentar otro, y ese sí que entraba.
3) Balón alto colgado al area (desde diferentes lugares) y empalme en diagonal de un jugador. Si se hacía bien, golazo de chilena.
4) Subir en línea recta desde abajo de la pantalla hacia la portería y chute raso hacia arriba. La visión en perspectiva hacía que el portero se lo tragase como un imbécil.
Meterle diez goles a Argentina con la selección japonesa, ese es el tipo de divertimento que me gustaba, sí señor... algo estilo PULP ¿no es así?
Tehkan World Cup
En mis tiempos mozos, en los que todavía ni me la machacaba ni ná, me pasé todo un verano con los amiguetes visitando un bar que disponía de esta maravillosa máquina recreativa. Creemos que el dueño pudo pagarse un chaletito en el campo a nuestra costa, eso sí, el ingreso en el banco lo hizo con monedas de cinco duros.
La máquina era un portento de tecnología, la pantalla la veías desde arriba, lo cual ayudaba mucho puesto que los jugadores dentro del campo los veías a vista de pájaro, y aquello nos encantaba. Además el juego tenía sólo dos putos botones, como Dios manda, de los cuales sólo era necesario ¡usar uno! ¡simplicidad al poder!
Los primeros adversarios eran carne de cañón para nosotros, así que para hacerlo más interesante competíamos a meter el gol en menos tiempo (cuatro segundos sacando desde el mediocampo), meter el gol desde más lejos o a ver quien le metía mayor número de goles. Las vaciladas se acababan en cuanto avanzabas un poco en el juego, porque los hijos de puta de los contrarios se volvían mucho más rápidos y peligrosos.
Cuando te enfrentabas a los brasileños la cosa se ponía seria, sus jugadores corrían tanto como los tuyos y si te despistabas un poquito, esos hijos de cariocas, te enchufaban un gol en menos que canta un gallo ¡y cinco duros a tomar por culo!
¿No os encanta la música? Esa batería es absolutamente hipnótica... ¿no la compuso John Williams o algo así? Alucinante, y esos efectos de sonido, los chutes, las segadas... menuda maravilla. A alguien debieron darle un EMY por eso...
Super Sidekicks
Al lado de mi instituto había un bar conocido por el alegre nombre de "el bar de la vieja", puesto que estaba regentado por una señora mayor y no había ningún tipo de nombre en la puerta (o al menos no nos fijamos nunca). Una máquina recreativa situada al lado de la puerta era un reclamo imposible de pasar por alto para los frikis del lugar. Aaaahh, "el bar de la vieja"... grandes transacciones se han hecho allí para sufragar los voraces vicios de algunos frikis descontrolados, muñequitos del warhamer por veinte duros, cartitas de magic por cinco duros, revistas porno por... en fin, grandes negocios se vieron allí, sí señor.
Como era ya una costumbre el Super Sidekicks consistía en un campeonato mundial de selecciones con posiblidad de elegir una táctica de equipo específica. El arcade en sí molaba cantidad y sus incorporaciones al mundo de los juegos de fútbol fueron numerosas y muy atractivas. Lo que llamaba la atención en un primer momento es que tenía un llamativo apartado gráfico similar al comic, lo cual daba mucha vistosidad a las partidas y a los frikis nos enamoraba.
También añadió el uso del empujón para robar el balón, la segada en plancha estaba muy vista y había posibilidad de esquivarla con un salto, ¡pero la carga no! desgraciadamente, si el árbitro estaba en la pantalla cuando hacías una carga te sacaba tarjeta amarilla e incluso podía sacártela roja, lo que nos condenó a jugar con sólo 10 hombres en más de una ocasión.
También apareció el jugador estrella, que normalmente era un delantero que corría más que el resto y cuando chutaba tenía mayores posibilidades de meter un gol que cualquier otro.
Los goles había que meterlos de dos maneras, un chute desde la frontal del área y buscar el rebote del portero para volver a chutar a gol, o colgar un balón al área para ver si alguien podía enganchar una bolea. En ocasiones, el jugador estrella, era capaz de meter un gol chutando directamente a portería a la primera, pero había que saber hacerle llegar el balón cerca de la portería.
La continuación del Super Sidekicks con segunda y tercera entrega certificaron la buena acogida de este título entre los frikis de las máquinas.
Pc Fútbol
Uno de los pocos juegos de fútbol al que merecía la pena echar unas cuantas horas en el pc de tu casa. A mi ordenador llegó durante la época en la que estaba moda "El día después" programa mítico de fútobl de Canal + presentado por Michael Robinson. Sí, amigos, de cuando teníamos que ver porno codificado porque todavía no había teles locales.
Seguro que habréis notado, porque si nos visitáis asiduamente es síntoma de que sois muy inteligentes, que este juego no se parece en nada a los tres anteriores, Y es cierto, si los anteriores eran arcades muy buenos, este juego en la parte arcade no era nada del otro mundo, más bien era tirando a malo. Pero todo lo demás era genial.
La posibilidad de gestionar el precio de las entradas, el aforo del estadio, negociar fichajes... aquello era un auténtico boom en el mundillo de los juegos de pc. Y luego estaban los piques con los amiguetes, que si yo he fichado a no se quien, que si he ganado la liga dos veces seguidas con el Alaves... ya verás mañana, le voy a meter cinco goles al puto Alaves, mamón.
Sólo queda informar a nuestro respetados lectores que el Extremadura CF llegó a ganar varias veces la copa de Europa gracias a mi magnífica gestión como Manager General. ¡Chúpate esa, Mourinho!
Epílogo
Para seguir disfrutando de los tres primeros juegos disponemos del MAME, genial emulador donde los haya.
Y el cuarto podemos buscarlo en Abandonware.
Cuatro grandes juegos que han pasado a la historia del frikismo de las máquinas recreativas. Epoca dorada en la que aprendimos a contar mentalmente con increíble rapidez de 25 en 25.
¿Dónde estas ahora, antaño tan deseada moneda de cinco duros?
PD:Que conste que no tengo nada contra el Alavés, a mí la liga profesional de fútbol me la trae bastante floja, la verdad. Me interesaba más los resultados de mi juego que los de la realidad. Y si algún seguidor del Alaves se ha sentido ofendido... ¡que se joda!
Y nos vais a perdonar pero aquí va otro post sobre un acontecimiento deportivo de actualidad, ¡otro! sí, sí, ya se que es algo repetitivo, pero la dirección ha decidido que es estrictamente necesario publicarlo por el bien de... ¡mis cojones! porque si no se me hinchan mucho y luego pasan cosas desagradables ¿estamos?
El deporte del Fútbol no es muy friki que digamos, carece de la belleza del voley playa femenino, de la sutileza del pressing catch o de la diversión sana y refrescante de Humor amarillo, y aun y así el apoyo popular a esta actividad sigue siendo mucho más alto que a estos grandes deportes frikis. Misterios de la vida.
Personalmente, la liga de fútbol profesional española me importa más bien poco (y las del extranjero ni te cuento), me resbala si gana la liga el Madrid, el Barcelona o el Sporting de Gijón... es que me la trae floja. Cuando era joven sí seguía los partidos de "mi equipo" con la misma pasión con la que veía un capítulo Campeones (tal vez no tanta) pero a medida que fuí creciendo me dí cuenta de que el fútbol es un negocio turbio, un duelo de egos barriobajeros, y que los jugadores, muchos de los cuales son, además de soberbios, poco más que analfabetos, cobran sueldos auténticamente desproporcionados que podrían ser mejor invertidos en millones de cosas... no como Tom Beiker, que era, es y seguirá siendo un tío cojonudo.
Pero las competiciones de fútbol europeas son harina de otro costal, amigos frikis, allí se juega algo más que el prestigio deportivo, ¡¡¡se juega el orgullo bélico de las naciones de los siglos XVI y XVII!!!
Acércate, acércate si tienes huevos
Hemos sustituido los campos de batalla de las guerras europeas por el mullido césped de los estadios de fútbol; los bizarros sombreros de ala ancha por los pelos engominados de punta; las camisas valonas por camisetas transpirables; las botas de piel hasta las rodillas por zapatillas coloridas con tacos; las orgullosas y largas picas por los remates de cabeza en los centros; los poderosos y efectivos arcabuces por los chutes con efecto; las nobles espadas de acero por chutes a la escuadra... ¡y las misericordias por insultos y los pellizcos a los rivales en los saques de esquina!
Vais a robarle el oro a vuestra puta madre, perros ingleses ¡BUMBA! ¡BUMBA! andanada de cañonazos por estribor.
¿Alguien sabe que Bicoca fué una batalla donde los españoles nos paseamos dandole un buen repaso a los franceses? Pues ahí nació la expresión "¡menuda bicoca!" para dar a entender que algo es muy fácil de hacer. ¡Si es que somos la hostia!
Fuera de nuestro mediterraneo, turcos infieles ¡KAPUM! pistoletazo a bocajarro.
Si la grandeza de un individuo la define la grandeza de sus enemigos, España ha tenido a los mejores. Y ya que ahora no podemos pegarles un cañonazo a los franceses por aquello del qué dirán, pues les metemos un golazo (aunque sea de rebote) y nos quedamos tan a gusto ¿no?
Lutero es el fruto de la unión del diablo y una puta de Flandes, perro protestante ¡ZAS! toma dos palmos de buen acero toledano en las entrañas.
Pues sí, los frikis, gracias a nuestra imaginación, vemos cosas más allá de pases en el medio del campo, centros al área, subidas por la banda o paredes en el campo contrario, nosotros vemos fuego de artillería, cargas de caballería, descarga de arcabuces y asaltos a posiciones fortificadas con una espada y una pistola... eso es la Eurocopa para nosotros, ¡honor y gloria o muerte y oprovio!
Volveos a meter dentro de vuestras fronteras, sucios franceses, ¡PUM! arcabuzazo que te llevas, gabacho mamón.
Los partidos internacionales de España son como esos duelos a muerte futboleros que llevábamos a cabo en el patio del colegio contra la otra clase, ya sabéis a quienes me refiero, ¡la misma intensidad, la misma pasión! ¡sin ofrecer cuartel, sin pedirlo! ¡"A" de asnos, MALDITOS BASTARDOS! ¡¡¡OS SIGO ODIANDO, CABRONES DE 6º A!!!
Y ahora, de nuevo, podemos rememorar gracias al fútbol las grandes victorias españolas conseguidas con sudor y sangre en Europa: Pavía, Lepanto, Breda... y esperemos que cuando lleguemos a cuartos, no tengamos que llorar nuestras amargas derrotas como Trafalgar o Rocroi... y aunque eso pase, ¡habremos luchado con orgullo y hasta el fin!
Iker Casillas es nuestro Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán; Cesc Fábregas, Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, el genial estratega; David Silva encarnaría a Hernán Cortés, con su velocidad y audacia, siempre hacia delante; Marcos Senna igual que Ambrosio Spínola, fuerte y decidido; y Torres y Villa, nuestros Alatristes, duros, fuertes, despiadados frente al enemigo...